miércoles, 24 de octubre de 2007

adonde vamos?


¡Adiós, pies! --gritó Alicia, porque cuando miró hacia abajo vio que sus pies quedaban ya tan lejos que parecía fuera a perderlos de vista--. ¡Oh, mis pobrecitos pies! ¡Me pregunto quién os pondrá ahora vuestros zapatos y vuestros calcetines! ¡Seguro que yo no podré hacerlo! Voy a estar demasiado lejos para ocuparme personalmente de vosotros: tendréis que arreglároslas como podáis... Pero voy a tener que ser amable con ellos --pensó Alicia--, ¡o a lo mejor no querrán llevarme en la dirección en que yo quiera ir! Veamos: les regalaré un par de zapatos nuevos todas las Navidades.

Y siguió planeando cómo iba a llevarlo a cabo:

Tendrán que ir por correo. ¡Y qué gracioso será esto de mandarse regalos a los propios pies! ¡Y qué chocante va a resultar la dirección!:

Al Sr. Pie Derecho de Alicia.
Alfombra de la Chimenea,
junto al Guardafuegos
(con un abrazo de Alicia).


¡Dios mío, qué tonterías tan grandes estoy diciendo!


(foto de mis piecitos bajando de la sagrada familia)

1 comentario:

Rizos dijo...

No dices tonterias, sólo estas inspirada!

besos y saludos